R.I.P. Brian Dennehy

Escrito por , el 18 abril 2020 | Publicado en Otros

La imponente presencia física de Brian Dennehy, de la mano de su talento interpretativo, fue siempre algo que se me quedó grabado en la retina desde que viese en su día First Blood (Acorralado, 1983), una de las películas más icónicas de los años 80, por muchas razones, por tantas que podríamos hacer un especial en profundidad sobre esta maravillosa película, empezando por la magistral partitura de un inspiradísimo Jerry Goldsmith y acabando con el curso de dirección magistral que impartió el canadiense Ted Kotcheff (digno de estudio para los nuevos directores que quieran meterse a trabajar en el género de acción)

Entre todas ellas, y una de las más sólidas sin duda alguna, es el papelón que se marca Brian Dennehy como el antipático y rudo sheriff Will Teasle del pequeño pueblito llamado Hope, un tipo que se cree con todo el derecho del mundo a gobernar los designios del pueblo y a decidir lo que está bien y lo que está mal, algo que muy pronto quedará patente con el abuso de autoridad que ejerce sobre John Rambo (un jovencísimo Sylvester Stallone, con quien Dennehy había coincidido en 1978 con F.I.S.T.), soldado y ex veterano de Vietnam.

Parte del encanto de esta película es esa brillante caracterización, y lo hace con algo que o lo tienes o no, y no es nada más y nada menos que magnetismo, ese carisma que distingue a los grandes actores, ese «algo» que hace que te quedes embobado viendo su interpretación.

Sería fácil quedarse con Teasle, uno de los villanos más odiosos y deleznables (también de los más humanos y realistas) de la historia del cine, pero el curriculum de Brian ha dado para mucho, desde potentes y poderosos villanos como el de Cobb en Silverado (1986), con un Bruce Broughton dándolo todo, hasta el perfecto comparsa en las dos entregas de F/X con el amigo Bryan Brown (con Bill Conti y Lalo Schifrin en las dos películas nada mas y nada menos), sin olvidarnos de su papel de extraterrestre en Cocoon (1986), con un James Horner en pleno apogeo, de policía asediado en el remake de Assault on Precint 13 (Asalto al Distrito 13, 2005) con un correcto Graeme Revell, o su papel de fiscal en Presumed Innocent (Presunto Inocente, 1989), con Harrison Ford acompañando y John Williams ofreciendo un sólido trabajo.

Con un globo de oro por Death of a Salesman (Muerte de un viajante, 2000) y su participación en la serie The Blacklist, Brian Dennehy se despidió con 81 años este pasado 15 de abril dejando una carrera llena de grandes y memorables interpretaciones que le han convertido, para muchos de nosotros (especialmente los que crecimos en los 80) en un actor querido a recordar y agradecer eternamente.

Sirva como cariñosa despedida el que es, para mi, uno de los main titles más bonitos y melancólicos de la historia del cine, el Home Coming de First Blood, cortesía del más grande, Jerry Goldsmith.

Descanse en Paz, GRANDE.