Gremlins… repito… Gremlins!!!
FSM me puesto una sonrisa de tontolabas permanente de aqui hasta finales de año… y más. Y no por ser previsible era menos esperado (como ya se anunció por el Foro de FSM hace ya meses). GREMLINS (1984). Casi ná…
La película que más veces vi siendo crío (cinco veces en dos días, en formato Beta de alquiler); y una de esas músicas que perduraron siempre dentro de mí, y quizás la primera gran semilla junto con E.T. de mi afición a la música de cine. ¿Te das cuen?. Se dice poco, vamos…
Me he pellizcado, me he dado una torta en la cara, he cerrado la puerta pillándome los dedos (esto último no que duele mucho…), y aún así no salgo del flipe general. Y es que es imposible hacerlo con una de las Holy Grail pendientes de edición, uno de los trabajos más destacados del Maestro Jerry Goldsmith en los 80, para su segunda colaboración con Joe Dante, con varios temas centrales realmente memorables, destacando la macarrada electrónica de tono pop para los Gremlins (esos siniestros y divertidos demonios verdes) y el tema de Gizmo, ambos antológicos, y que han traspado lo estrictamente cinematográfico.
El primer CD incluye TODA-Todita-TODA la partitura, sesenta minutacos de nada, con trece minutos de bonus tracks, donde tenemos momentos tan memorables como los Main Titles (con Billy yendo a trabajar en bici con su perro con el pueblecito completamente nevado), el motivo de connotaciones negativas y divertidas para la señora Deagle, o toda la parte final del clímax, destacando el rescate de Gizmo, de antología.
Quizás le sobre el CD dos, que incluye el LP y CD editado en su día (Geffen en el último caso), con las canciones y los raquíticos 16 minutos que, legalmente, pudimos saborear hasta la llegada de este FSM, pero ni tan siqueira (Pa la Saca), y menos al precio de 24,95$, y … OJO AL DATO… sin LIMITAR. Pa morirse…
Por si te parecía poco, FSM remata el guantazo con una palmada en la espalda, y nos deleita con un CD donde nos encontramos con dos series: Nighwatch (1965-1966), concretamente el episodio piloto, a cargo del joven John Williams, y la serie Killer by Night (1972), del genial Quincy jones, al precio de 19,95$.
En el primer caso, se trata de la primera colaboración de Williams con Robert Altman (con quien trabajaría posteriormente en Images y The Long Goodbye), donde destaca su main title y un tono de suspense musical en consonancia con el capítulo piloto de la serie.
Para Killer by Night (1971), donde encontramos a Robert Wagner en el reparto, Quincy Jones nos ofrece sus habituales ritmos jazzísticos, con hábil manejo de percusiones y vientos, y con inclusión de música de tensión para este thriller policiaco.
En definitiva… se anticipan las navidades, y nuevas ruinas a la vista. No puedor, no puedor… GREMLINS. Tá tó dicho.