Primer contacto: «Warrior» de Mark Isham
Si hay alguien en el panorama de la música de cine actual que logre la fusión perfecta de una parte orquestal con la parte electrónica de una banda sonora, ese es Mark Isham. Su sello inconfundible en cuanto a lo electrónico suele dar con la clave para entender el tono de las películas, aportando ambiente y melodías a las secuencias, ritmo y acción… capturando el espíritu que hay tras los fotogramas y elevando a los personajes a través de la música, a la categoría de personas.
En su último trabajo editado, Warrior (2011) (disponible en descarga digital [iTunes] desde el 29 de Agosto y en formato CD a través de Lakeshore Records a partir del 13 de Septiembre), Isham ofrece una partitura que en sus propias palabras: «tiene una extremadamente amplia gama de elementos dinámicos y dramáticos, quizás más que ningún otro score que haya compuesto».
La película del director Gavin O’Connor (con quien Isham ya trabajó en Miracle (El Milagro, 2004) con notable éxito), se estrenará en Estados Unidos el 9 de Septiembre y narra una historia de enfrentamiento, separación y reconciliación familiar, con un telón de fondo deportivo. Los hermanos Tommy y Brendan Conlon (Tom Hardy y Joel Edgerton) distanciados tiempo atrás, terminarán enfrentándose en SPARTA el mayor evento del tipo «el ganador se lo lleva todo» de la historia de las artes marciales mixtas. Tommy es un marine atormentado por su pasado que regresa a casa tras catorce años para conseguir la ayuda de su padre (interpretado por Nick Nolte) para entrenar para el campeonato. Brendan es un ex-luchador metido a profesor que regresa al ring en un desesperado intento de salvar a su familia de la ruina financiera. Ambos hermanos resultarán imparables, y cuando la situación oprime a Brendan más allá del límite, terminarán enfrentándose dentro y fuera del ring no solo por el campeonato, sino también por los motivos que les separaron en primer lugar. La película promete ser un contundente drama, cuyo clímax final se anuncia como «inolvidable» y «que hay que ver para creer».
Más allá del aspecto publicitario de la película y dado que está por estrenar, no es mi intención hacer una reseña «al uso» de la partitura de Mark Isham, sino unos comentarios sobre qué me he encontrado en este nuevo trabajo, olvidando por fuerza cualquier aspecto que no sea el musical.
La instrumentación se basa principalmente en el conjunto de viento-metal y de cuerdas, con un tono algo oscuro por parte de la orquesta que realza el dramatismo de la historia. Mientras que la mayor parte de la banda sonora está recorrida por guitarras que ofrecen diferentes ritmos o melodías, y unidas a toda la parte electrónica componen la visión de Mark Isham de la parte deportiva, por otro lado tenemos los aspectos minimalistas de la música, ligados principalmente a los personajes y que se basan fundamentalmente en un cello que suele acompañarse de unas lánguidas notas de piano, sin ofrecer melodías claras.
La banda sonora comienza con un tema que rinde tributo al conocido Himno a la alegría de Beethoven, transformando la famosa melodía en un motivo épico, por la vía electrónica. Se pasa de presentar la melodía con un ritmo sugerente de fondo, a transformarla en un ritmo contundente con una melodía que acompaña. Este será el carácter principal de casi todo el score, reflejar la épica de la lucha, en este caso esa extrema mezcla de artes marciales que enfrenta a los hermanos en el ring pero también el conflicto personal que les separa. Además el tono general de la música está perfectamente representado en este tema de apertura.
La parte electrónica, fusionada perfectamente con la orquestal (no podía ser de otro modo), es para mí el motivo que hace avanzar a la música a lo largo de la escucha de toda la banda sonora. Muchos ritmos que acompañan a melodías suaves, que parece que quieren encontrar su camino hasta dejar la «segunda fila» y hacerse completamente «visibles». La habilidad de Isham en este tipo de temas, huyendo del uso de temas principales perfectamente reconocibles a lo largo de las películas, suele dar un gran resultado cuando hablamos de expresar con música las emociones y los conflictos internos de los personajes complejos, como parece ser el caso en Warrior.
El conjunto de los temas digamos «minimalistas» sigue este patrón de búsqueda de un cierto orden interno, pero también lo encontramos en los temas digamos de «acción», donde la electrónica juega un papel algo más importante (adoptando ciertas modulaciones algunos temas podrían llegar a acercarse peligrosamente al sonido Vangelis). Es en estas partes donde la sección de percusión une todos los elementos e impulsa la música a través de espectaculares altos y bajos, recorridos por ritmos cambiantes y no simples variaciones, que impiden que (a falta de ver la película) puedas decir que Isham simplemente «empapela» las escenas de acción con un fondo musical.
Muy por el contrario, y teniendo en cuenta la larga duración de algunos de esos temas y por tanto de las secuencias, Isham no compone música de fondo o de acompañamiento, sino que cuenta una historia en el desarrollo de cada tema. Me encanta cómo en este caso se puede seguir el desarrollo musical como si fuese un hilo argumental, donde existe un planteamiento, acción-reacción y un desenlace, en el que el clímax musical parece el perfecto final para lo que se ha venido escuchando, pero no lo resuelve todo sino que deja la puerta abierta al verdadero clímax de la película.
No podría recomendar más un trabajo de uno de los más grandes compositores en activo, que ha tenido la increíble habilidad de contar una historia sin repetirse, siendo fiel a sí mismo y dotando al conjunto de dos visiones musicales alternativas que sin embargo se complementan, y durante la escucha de la banda sonora el paso de esa parte minimalista a la otra más excitante parece natural solamente por el buen hacer de Mark Isham, que hace de las partes un todo…
A falta de ver la película, bien está poder indagar en las propias reflexiones del compositor sobre su trabajo, y otros enlaces de interés:
- Mark Isham talks about boxing, MMA, UFC, and scoring «Warrior»: [Youtube]