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Al Salir del Cine: «In The Heart of The Sea»

Escrito por , el 6 enero 2016 | Publicado en Apuntes

Sobre La Película…

Muchas expectativas eran las que tenía al ver esta película. Cine de aventuras, dirigida por la mano experta y sabia de Ron Howard, capaz de dar espectáculo a la vez que contar una historia que me pudiese importar y con la que pudiese conectar.

En el corazón del mar está basada en la historia real en la que se basó Helman Melville (Ben Wishaw) para escribir Moby Dick. Así conoceremos a través de flashbacks la historia de Owen Chase (Chris Hemsworth) y otros marineros del Essex, los cuales tuvieron que sobrevivir en condiciones extremas tras el ataque de una gigantesca ballena blanca.

Y la verdad es que la película, en parte, no defrauda. La poderosa maquinaria hollywoodiense se pone en marcha para ofrecer un espectáculo de primer nivel, imprescindible verlo en cine gracias, en parte, a unos espectaculares  efectos especiales, a veces pasados de rosca y algo artificiales desvirtuando el trasfondo dramático de la historia.

Pero más que éste importante hándicap la película sufre unos importantes cambios de ritmo entre la parte de acción y la parte dramática. La primera peca de cierta ampulosidad y desagradecido grado de sobrecargamiento mientras la segunda queda más en segundo plano y algo desdibujado cuando para mí es la verdadera alma de la película. Me refiero, claro está, a esa imposible relación del hombre con el medio marino y su afán por dominar algo que es insondable e ingobernable.

Resulta así una película de resolución fallida y con una sensación de haberte dejado a medias en ciertos aspectos de la historia en los que podían haber ido mucho más allá. Es una película que queda devorada por su propia ambición y por ese absurdo precepto de cuánto más grande mejor. Aún así conserva la esencia del mejor cine de aventuras y las grandes odiseas marinas.

Sobre la Banda Sonora…

Las formas se imponen al fondo. Esta es la única conclusión a la que llego después de haber visto la película y haber escuchado de forma aislada esta banda sonora. No hay duda del gran talento de nuestro Roque Baños, uno de los mejores 10 compositores que hay en activo en el panorama de la música de cine pero su gran habilidad para componer temas memorables y gran música, en general, queda mancillado por el encorsetamiento del tono de la música y su afán de impactar más que de contar o transmitir. Roque es un gran melodista, eso está claro, capaz de trasladarnos con su música a los universos que nos plantea la película sin perder un ápice de su elegancia y de su fuerza musical pero dónde hay patrón, no manda marinero….nunca mejor dicho.

Pero centrémonos un poco más en su música. La suya es una música poderosa en lo temático, con dos estupendos y poderosos temas centrales, uno más enérgico y vital para designar la aventura y a los balleneros en particular y otro más evocador y sumamente inspirado para el mar y la relación de éste con el humano. Es un tema de aire nostálgico, ciertamente desesperanzado y que parece llorar continuamente, tal vez perpetuando ese afán de dominio que el ser humano impone sobre el medio marino. Lo malo es que todo este excelente trabajo de composición queda cubierto (y absorbido) por un tamiz de artificiosidad y ampulosidad que deja en suspensión una partitura que podría haber sido una obra maestra si el murciano hubiese hecho lo que mejor sabe hacer.

El resultado es una música efectista, insustancial e impersonal en las formas  que, claramente ésta, recuerda mucho a la «música zimmeriana».  Aún así, me quedaría con el trabajo que hay detrás, con lo que permanece en la sombra y quiere continuamente salir, tal como lo expresa ese arrebatadoramente bello The white whale chant de los end credits donde el compositor, esta vez sí, deja claro cuál ha sido la línea melódica que ha querido seguir.