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The Book Thief

Nueve años han tenido que pasar para que John Williams trabaje a las órdenes de otro director que no fuera su amigo Steven Spielberg. Aquel 2005 resultó ser un año muy productivo para el compositor gracias a su vuelta al universo creado por George Lucas en Star Wars: Episode III Revenge of the Sith, y a su participación en Memoirs of a Geisha, además de sus partituras para los nuevos proyectos de Spielberg, War of the Worlds y Munich. Un gran año en el que para muchos su mejor trabajo fue el realizado para Memorias de una Geisha, que suponía su primera —y hasta la fecha última— colaboración con el director Rob Marshall.


The Book Thief (2013)

Compositor: John Williams
Año: 2013
Cómprala: Si te gusta Williams y su vertiente más dramática e intimista, acompañada por numerosos temas que destacan por su caracter melódico.
No la compres: Si buscas una banda sonora con un sonido más moderno, ya que The Book Thief nos ofrece una música orquestal del Williams de siempre.
NUESTRA NOTA

Este año The Book Thief supone de nuevo una primera colaboración, en este caso con Brian Percival —conocido por su participación en la serie Downton Abbey— en la que es su segunda película. Y es que al igual que sucedió en Memorias de una Geisha, ha sido el propio Williams el interesado en realizar el trabajo debido a su admiración por la novela homónima escrita por Markus Zusak.

La adaptación de La Ladrona de Libros nos acerca de nuevo a la Segunda Guerra Mundial a través de los inocentes ojos de la joven Liesel (Sophie Nélisse). Tras ser enviada a una casa de acogida por su propia madre, la cual no iba a poder cuidar de ella, conoce a sus nuevos padres adoptivos (Geoffrey Rush y Emily Watson) y al agradable Rudy (Nico Liersch), quien se convertirá en su mejor amigo.

De forma gradual, la protagonista va descubriendo las circunstancias y sinsabores que la han llevado hasta su situación, así como el odio y fervor patente en dirigentes y ciudadanos que celebran su ideología a través de la destrucción de la cultura. Sin embargo Liesel, ayudada por su padre adoptivo, descubre en la literatura un bastión de refugio y aislamiento de los acontecimientos que la rodean, y que a su vez ayudan a reconfortar a un nuevo y secreto amigo cuya existencia nadie debe conocer.

En líneas generales se trata de una película agradable, aunque nada destacable, que nos habla de la amistad, la generosidad y la humanidad de las personas, y ante todo de la delgada línea existente entre la vida y la muerte. De estos mismos aspectos nos hablan las notas musicales de John Williams, quien nos regala una partitura milimétrica en su adaptación y variada en su concepción, con diferentes bloques temáticos asociados a los personajes que encuentran siempre un nexo común: Liesel, y el amor ésta siente por la literatura.

Podemos encontrar cierta relación de la partitura con la realizada por el compositor en 1999 para la película Angela’s Ashes. De nuevo el piano se usa como base instrumental para representar una historia vislumbrada desde la inocencia. Sin embargo The Book Thief presenta mayor variedad orquestal, pretendiendo el máximo acercamiento a los sentimientos de la protagonista. La música nos habla sobre la amistad, la diversión, la intolerancia, el miedo o la esperanza, y lo hace a través del buen hacer que caracteriza al compositor.

BLOQUES TEMÁTICOS

Liesel y los libros

En una época en la que no abundan las bandas sonoras con temas asociados a los diferentes personajes que componen una historia, Williams nos ofrece un trabajo lleno de oficio que destaca, precisamente, por su variedad temática. Si en la película llama la atención la presencia de un protagonista absoluto, en el guión musical encontramos su equivalente en el tema dedicado a Liesel, la “ladrona de libros”. Se trata de un motivo sencillo que representa la inocencia, a la vez que la fortaleza del personaje principal.

Desde esta perspectiva, el compositor nos ofrece un doble acercamiento al tema. Por un lado, en cortes como One Small Fact 0:40 o Learning to Write (1:06) , Williams utiliza la sección de cuerda y viento para enfatizar la seguridad de Liesel. Sin embargo, el piano y el arpa se convierten en los protagonistas para mostrar la inocencia y la búsqueda de sabiduría de la joven cada vez que entra en contacto con las palabras, ya sean en forma de libros, cartas o mediante la redacción de su propio diario. En la edición discográfica encontramos numerosos ejemplos de este caso, como por ejemplo en Writing to Mama (1:35) , Learning to Write 0:39 e Ilsa’s Library (1:01) donde el piano es acompañado por las cuerdas en los dos primeros casos y por arpa en el tercero, o en Jellyfish 1:00, donde el arpa se convierte en el instrumento principal.

Además del dedicado a Liesel, habría que añadir otro tema de gran importancia que complementa al anterior. Se usa de forma frecuente un sencillo leitmotiv interpretado a piano, asociado a la necesidad de aprendizaje y a la atracción que ejercen los libros sobre la protagonista. Aparece por primera vez en One Small Fact (1:11), y alcanza protagonismo en el segundo corte The Journey to Himmel Street 0:47. El tema adquiere mayor importancia y delicadeza durante los momentos en los que Liesel se encuentra en la biblioteca de Ilsa, como en Ilsa’s Library (0:15) o en Jellyfish (0:12), precediendo en ambos casos al tema principal de la película.

En tercer lugar, se nos ofrece un último tema dedicado a Liesel y su amor por la literatura. Conceptualmente se trata del motivo más ambiguo de la partitura, que podemos relacionar con el acto de “robar”, o más bien de tomar prestado. Se trata de una bellísima interpretación por parte de la sección de cuerda, que en la película aparece por primera vez cuando la protagonista se dirige a la casa de Ilsa. New Parents and a New Home

Uno de los mejores cortes de la edición discográfica, Learning to Read, nos muestra la relación existente entre los tres temas anteriormente citados. La emotividad y la elegancia características de Williams se apoderan de una escena en la que la música aparece en primer plano y se convierte en la principal protagonista. La decisión y fortaleza de Liesel, así como la fuente de soluciones que ha encontrado en la literatura, se ven fuertemente reflejados en casi tres minutos de música que definen perfectamente el carácter de la película.

El narrador de la historia

“Un pequeño hecho. Usted va a morir”. Estas son las primeras palabras con las que da comienzo el filme, a través de la profunda voz del elocuente narrador de la historia. Se trata del personaje más cínico de la función: la muerte. Son varias las escenas reservadas para él, donde la película adquiere un aire místico y trascendental —ayudado por el uso de la cámara lenta— en el que tanto la temática de la vida como de la muerte son tratadas con frialdad.

En contraposición al flamante humor negro del narrador, Williams nos ofrece uno de los temas más bellos de la partitura, caracterizado por la calidez y melancolía que transmite. Unas notas a piano introducen One Small Fact, acompañando las palabras de la muerte al comienzo de la película. El compositor realiza dos tipos de aproximaciones a dicho tema a lo largo del filme, diferenciando por un lado los momentos en los que el narrador nos habla sobre Liesel —al inicio y al final— y los que lo hace sobre las circunstancias o personajes que componen el entorno de la protagonista.

Para el primer caso recurre al piano como instrumento principal, asociándolo de esta forma al tema de los libros tan vinculado a Liesel. Esta relación la podemos escuchar en The Journey to Himmel Street 0:25, en el que la tristeza del tema de la muerte, acompañando la desolación de la protagonista tras una pérdida, da paso a la esperanza transmitida por el tema de los libros (0:46), que representa el primer “robo” de Liesel y la puerta abierta a un nuevo mundo.

La siguiente vez que encontramos el motivo referenciando a la pequeña Liesel tiene lugar al final de la película, en la conclusión o epílogo de la misma, y lo podemos escuchar en Finale 0:55. De nuevo el piano es el protagonista de lo que es una bellísima y elegante variación del tema de la muerte, en el que la tristeza transmitida con anterioridad da paso a una sensación de optimismo liberador.

El tema se sigue utilizando a lo largo del filme en cada ocasión en la que el narrador hace aparición. Para hablarnos sobre el efecto de la guerra en las personas o sobre la entereza del ser humano a la hora de enfrentarse a la muerte, la música adquiere un cariz más sobrio gracias a la utilización del oboe. En el inicio de The Visitor at Himmel Street podemos escuchar un ejemplo de su uso en el que será el principio del desenlace de la historia.

Liesel y su entorno

No faltan en la partitura ciertos temas que tienen el propósito de reflejar tanto el estado de ánimo de la protagonista, como el apego que ésta experimenta hacia el resto de personajes. La diversión, o incluso las “pillerías”, se manifiestan en cortes como The Snow Fight y Foot Race, donde una pelea o una carrera por la calle junto a Rudy sirven de excusa para recuperar el aire mágico que tanto caracteriza al compositor y que perfectamente representa el mundo desde la perspectiva de la infancia.

En contraposición a estos enérgicos cortes, destacan otros dedicados también a Liesel y Rudy como I Hate Hitler!, donde el arpa simboliza de nuevo la inocencia en un tema sencillo y delicado que enfatiza la confianza existente entre los dos pequeños.

Gran importancia tiene también la relación de Liesel con Max, amigo cuya existencia nadie debe conocer. La profunda amistad queda perfectamente reflejada en un tema emotivo, a la vez que contenido, interpretado principalmente por el oboe.

Aunque el corte Max and Liesel está dedicado completamente al mismo, adquiere su máxima belleza y delicadeza en Max Lives y The Departure of Max, donde se muestra a la perfección la importancia que tiene este personaje dentro de la vida de la protagonista.

En la partitura no faltan los momentos de tensión, aunque eso sí, de forma muy contenida. Los miedos e incertidumbres de Liesel quedan reflejados en Book Burning , donde el compositor expone un tema caracterizado por su dramatismo y oscuridad, y que sirve de sencillo acompañamiento a la intolerante quema de libros por parte de los Nazis.

Las consecuencias de la guerra

Algo característico de la partitura es la prevalencia del bien sobre el mal. Todo gira en torno a la figura de una niña con una capacidad de aislamiento desconcertante. Por muchas penurias que haya que afrontar, Liesel siempre encuentra el modo de refugiarse en la literatura, una puerta abierta que le hace ver la vida desde una perspectiva cuanto menos optimista. No obstante, la historia nos reserva ciertas partes donde se hace patente la habitual pérdida de personas queridas en una guerra.

Durante la penúltima aparición del narrador, dispuesto a realizar su trabajo, el compositor nos ofrece un apacible tema que sirve de colchón ante el trágico porvenir de ciertos personajes. Lo podemos escuchar en The Visitor at Himmel Street (0:25), interpretado por las cuerdas que a su vez son acompañadas por el arpa.

Sin embargo, el Williams más dramático lo encontramos posteriormente, en un sencillo aunque espléndido adagio de cuerdas construido en torno a cinco notas (Rudy is Taken). El tema, perfecto ilustrador del desasosiego experimentado ante la pérdida, ya se esbozaba con anterioridad en la película, precisamente en el momento en el que Liesel, temiendo que pueda ser la última vez que lo vea, se despide de su padre adoptivo en la estación de tren The Train Station.

CONCLUSIÓN

Las apetencias musicales están variando con las nuevas generaciones. Eso es un hecho. Y el gusto por lo pasado parece ser que también. Hace poco leí un comentario en internet que venía a decir que Morricone tenía que darle las gracias a Tarantino ya que, si no fuera por sus películas, hoy día no sería reconocido por nadie. Por supuesto esto pertenece a un aficionado genérico, amante del cine actual y totalmente alejado de la cultura cinematográfica.

Sin embargo dentro de los aficionados a la música de cine está pasando algo similar. Las nuevas generaciones —si por edad fuera yo también debería estar dentro de este grupo— defienden la originalidad de Hans Zimmer —que cuando no se autorreferencia busca la inspiración precisamente en autores como Morricone—, Michael Giacchino —quien tiene su máximo estandarte en la música de antaño, representando la vuelta de un estilo que no abunda—, Alexandre Desplat —con numerosas referencias en sus orígenes (que no copias) al propio Williams y durante los últimos años a compositores como Richard Robbins—, etc. Estos son compositores a los que admiro, pero que por supuesto no suponen para mí un ejemplo de la originalidad tan defendida en determinados círculos. Y eso no tiene nada de malo, ya que siguen siendo excelentes compositores que han conseguido encontrar una voz representativa y propia, y que ante todo consiguen hacernos disfrutar con sus trabajos.

Ciertamente, en lo referente a The Book Thief, no nos encontramos ante una partitura que destaque por su originalidad. Los temas, aun siendo nuevos, desprenden cierto aire reconocible por todos los aficionados. Y aunque entiendo que mucha gente pueda esperar lo contrario, digo yo que el compositor más laureado de la música de cine, a sus 82 años, y ante una película convencional, no tiene la inquietud de investigar nuevas estructuras musicales con las que reinventar la historia del género.

Desde mi punto de vista se trata de una banda sonora de las de siempre. Agradable, variada pero contenida, emocional y, ante todo, llena de matices. Como siempre, Williams sabe acercarse al momento histórico del que deben provenir las notas, y ofrecernos la perspectiva musical de la inocente pero valiente Liesel. Con ella ha conseguido una nueva nominación al oscar —ya son 49— que premia el esfuerzo y el oficio un compositor incansable al que, ojalá, le esperen muchos trabajos por delante.

Listado de temas

01. One Small Fact
02. The Journey to Himmel Street
03. The Snow Fight
04. Foot Race
05. Writing to Mama
06. Book Burning
07. New Parents and a New Home
08. Ilsa’s Library
09. Jellyfish
10. Learning to Read
11. Revealing the Secret
12. Rescuing the Book
13. Max Lives
14. Max and Liesel
15. The Departure of Max
16. The Train Station
17. I Hate Hitler!
18. Learning to Write
19. The Visitor at Himmel Street
20. Rudy is Taken
21. Finale
22. The Book Thief
Este es el orden cronológico de los temas en la película.
Ver orden en el CD
Duración 52:03
Compositor: John Williams
Sello: Sony Classical (SONY970723)
Formato: CD y descarga digital [SAE / iTunes]
Fecha de publicación: 8 de Noviembre, 2013
Escuchar Online: SoundCloud.com
Enlaces: www.thebookthief.com | IMDB