Análisis
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Género
Documental, Drama
Lo mejor
El pleno acierto de la elección del tono musical de Paloma en su capacidad para evocar y sugerir todo lo que vemos en el documental
Lo peor
Absolutamente nada, es perfecta cómplice de la mirada de la directora y de esa vida Chipén que vemos a través de Paco Foto

La Vida Chipén

2021

Este fin de semana arrancarán los Goya en su gala número 37, y entre las múltiples nominadas en sus diferentes categorías, hemos querido hacernos eco de la música compuesta por Paloma Peñarrubia para el genial documental de ficción (docuficción que llaman) de La Vida Chipén (2021).

Este genial y reflexivo repaso de la España franquista de los años 60 y  70 de la Costa Sol (Torremolinos a más señas), con un recorrido final que llega hasta nuestros días, se beneficia del genial material compuesto por Paloma, incluyendo la estupenda canción Un Paraíso en el Sur, nominada al Goya a la Mejor Canción.

La Vida Chipén – Fantasmas del Pasado (viviendo en nuestro presente)

A través de la mirada cómplice de un personaje ficticio, Francisco Lafuente (Paco Foto, interpretado fantásticamente por Antonio Reyes), la directora Vanesa Benítez se sirve para contarnos el inicio del boom turístico español de la Costa del Sol, en especial Torremolinos, allá por los 60 y los 70, donde el Régimen Franquista de la época trató de consolidar la «Marca España» para atraer y consolidar el turismo, sirviéndose de los habituales tópicos: sol, playa, piscina, paella, flamenco… muchos nombres que hoy aún perduran, en los tiempos que corren, en la memoria colectiva actual, en especial en el extranjero.

Todo parece desenfadado al comienzo, con un personaje que va encontrando su hueco en la Costa del Sol, ascendiendo de albañil y botones a fotógrafo para el Ministerio, destinado a fotografiar celebridades para potenciar el turismo y venderlo a toda costa.

Lo que inocentemente empieza va dando lugar, finalmente, a la inevitable especulación inmobiliaria de todo tipo de piratas, macarras y estafadores que buscan lucrarse a toda costa, «caiga quien caiga», sin medir las consecuencias, y cayendo entre todo tipo de fraudes (algo que hoy día está de candente actualidad).

Creo que la directora ha sido muy inteligente a la hora de contar este documental a través de los ojos de Paco Foto, con quien conocemos de primera mano no solo casos reales de estrellas que estuvieron en la Costa del Sol (como el episodio de Frank Sinatra) sino incluso la lacra que suponía para el régimen los locales de dudosa moralidad (en especial los de ambiente homosexual).

Pero lo más terrorífico es el CEMENTERIO INMOBILIARIO en el que se han transformado muchos de estos lugares turísticos en varias zonas, con hoteles y apartamentos abandonados y descuidados, con un toque fantasmal y casi apocalíptico, pero hecho todo con muy buen gusto, jugando con el blanco y negro o la combinación de los colores (a ello contribuye la genial elección del traje azul de Paco o la excelente fotografía de Antonio Galisteo).

Al final, una mirada melancólica, sonriente pero triste, nos trae de vuelta ecos del pasado, recuerdos de lo que fue y de lo que acabó siendo, reflejo de lo mejor y lo peor de la condición humana (en especial la de algunos dirigentes y empresarios), y en este caso, de la derivada de la especulación urbanística e inmobiliaria, un fantasma del pasado que aun vive en nuestro presente, y que no tiene pinta de marcharse…

La Vida Chipén – El universo de Paloma

A lo largo de 80 minutos, este documental se sirve de fotografías, imágenes y publicaciones de otra época para hablarnos de la mítica Costa del Sol, especialmente de los años 60 y los 70, con una mirada final a los tiempos modernos del COVID (siendo el Turismo uno de los principales sectores afectados por el «bicho»).

En ese repaso visual cobra especial relevancia la música que suena a lo largo de la duración de este docuficción, donde la banda sonora de Paloma funciona como un reloj suizo.

Su brillante trabajo cumple perfectamente tanto la función de evocar y sugerir toda una serie de emociones, desde la felicidad de una época pasada y aparentemente inocente, con una mirada optimista (y también melancólica) a través de Paco Foto, hasta reflejar otra cara menos amable y más ácida de la historia, como toda la especulación inmobiliaria y los esfuerzos del régimen franquista por imponer su sistema de principios y no libertades para algunos colectivos (como los homosexuales).

En palabras de Paloma, este docuficción le supuso un reto que le exigió revisionar la música de aquella época, un reto que ha superado con creces y donde su experiencia y oficio han desembocado en una composición sólida y efectiva.

Sintetizadores de la época, el uso de la voz, el sonido de ese órgano tan característico de aquella época (estilo órgano Hammond o el melotrón), percusiones exóticas, punteos de guitarra setenteros,… todo una mezcolanza sonora de elementos que dan un color maravilloso a La Vida Chipén.  Y todo ello aderezado con la fantástica voz de Maria Vergara (que además de cantar la canción nominada a los Goya pone voz a toda la banda sonora de La Vida Chipén), al genial sonido jazzy de la trompeta de Nacho Loring o al excelente oficio de Julián Sánchez comandando el piano o la electrónica.

Paco Foto, el primer corte musical que vemos aparecer tanto en pantalla como en la edición digital disponible en Youtube y Spotify, establece ya parte del tono y del color musical con el que Paloma ha empapelado magistralmente La Vida Chipén, música evocadora y luminosa, con trazos de una pequeña melancolía, pero que recogen perfectamente ese comienzo del viaje que emprenderemos a través de los ojos del protagonista.

En cortes como Verano Tecnicolor, por poner un ejemplo, encontramos una música desdentada y alegre, de connotaciones exóticas, muy de los 60’s, con el sonido de una música que, casa a ritmo de samba, apoyada con el sonido de una sensual voz de fondo y el de una trompeta con sordina en modo jazzy, logra hacernos entrar de lleno en aquella época.

Ese ritmo jazzy está más acentuado en el genial y breve corte Pasillo a la Fama, incluyendo un ritmo de batería tan de la época, o potenciando el sonido del órgano en esa misma línea en el maravilloso I’m not a Tourist, que da título a uno de los capítulos en los que se estructura La Vida Chipén.

Y como contrajemplo, utiliza ese mismo ritmo en el corte Piscinas Vacías, transformándolo en un tema triste y melancólico, con connotaciones fantasmagóricas, para ponernos de relieve el cementerio en el que se ha convertido gran parte de esos paraísos de la Costa del Sol.

Ese contraste maravilloso lo encontramos a lo largo de la partitura, música más alegre o luminosa en contraste con pasajes musicales más melancólicos o grises, pero siempre equilibrado, y al servicio de las imágenes. El balance musical de la banda sonora va de la mano del personaje de Paco Foto, quien repasa su historia desde que era chaval y su recorrido en la Costa del Sol, Torremolinos a más señas, en una degradación que va de la mano de aquel paraíso que parecía sería eterno, pero no lo fue.

Decadencia y Corrupción (como el caso Sofico) es un corte que representa perfectamente esa degradación, con unas texturas musicales sugerentes, de nuevo con esa maravillosa voz fantasmal alzándose sobre el conjunto musical, de tonos más dramáticos, y con unos maravillosos sintetizadores envolviéndolo todo, especialmente en el tramo final (que ya aparecen por primera vez en el genial corte Boom Urbanístico).

Esos mismos sintetizadores volverán a la carga de nuevo en el corte Nostalgia y Olvido, de nuevo otro fantástico momento musical para ver en pantalla la situación actual de aquel paraíso terrenal ahora denostado y olvidado, a través de los ojos de Paco, a quien Paloma humaniza con pasajes musicales que sugieren ese recuerdo doloroso de otra época pasada.

La entrada en los 70 también permite incrementar brillantemente la paleta musical de Paloma, como en Torremolinos «La Nuit», donde sin perder esa sonoridad de los 60`s tan desenfadada y ligera (ese mítico easy listening de compositores como Henry Mancini o Antón García Abril), introduce el sonido de punteo de una guitarra eléctrica, recurso super habitual en aquella época (incluso con un toque muy caña, como nos indicaba la compositora), y con un aire muy psicodélico que encaja perfectamente con lo que vemos en pantalla.

Adiós cierra perfectamente ese periplo musical, a modo de coda y de la mano de un Paco Foto ya envejecido, dispuesto a partir rumbo a la última parte de su viaje, con una música cautivadora y de nuevo evocadora, una que ha estado siempre acompañando a este maravilloso documental de ficción, dándole no solo el color que necesitaba, sino el alma que pone voz a un tema espinoso.

Este cierre final contribuye, por un lado, a levantarnos una sonrisa nostálgica de un pasado reciente, pero que también nos hace reflexionar, y mucho, sobre esta España nuestra, una que trata de ocultar sus miserias debajo de la alfombra, tratando de vendernos algo que no es más que felicidad efímera y perecedera.

Mención aparte para la estupenda canción de Un Paraíso en el Sur, nominada a los Goya, una canción compuesta por Paloma Peñarrubia, con letra de Vanesa Benítez y cantada por María Vergara.

Su melodía capta perfectamente la esencia musical de los 60, un tema que emerge con su propia voz al margen de la banda sonora, pero que se incrusta perfectamente con la paleta musical de la compositora, cerrando perfectamente la experiencia musical de La Vida Chipén, mezclando magistralmente el español y el italiano.

La única pena que me queda, a nivel personal, es no ver nominado el fantástico trabajo musical de Paloma a mejor composición del año, pero al menos la nominación a mejor canción hace justicia con este brillante trabajo que no debería pasar desapercibido.

Paloma PeñarrubiaLa Vida Chipén – Conclusión

Cada año que pasa Paloma Peñarrubia sigue creciendo como compositora en el industria, es un hecho, y lo mejor de todo es que sus inquietudes musicales la permiten ir abarcando nuevos retos que la exigen estar al pie del cañón, buscando nuevas fronteras musicales con las que ampliar tanto su filmografía como ayudar a contar las historias que se le van presentando año tras año ante ella, sean del medio que sean.

Independientemente de que se alce con el Goya o no (que ojalá que SI, se lo merece), para mi ya es una ganadora absoluta, y uno de los principales valores musicales al alza que tenemos ahora mismo en nuestro País. Solo me queda seguir disfrutando y aplaudiendo lo que venga por delante, no me cabe la menor duda.

Enhorabuena Paloma, y a continuar creciendo.

La Vida Chipén

  1. Paco Foto 01:05
  2. Un Paraíso en el Sur 01:18
  3. Boom Urbanístico 01:29
  4. Pasillo de la Fama 00:54
  5. Apartamentos Edén 01:25
  6. Verano Tecnicolor 02:10
  7. Piscinas Vacías 01:06
  8. I'm not a Tourist 02:36
  9. Decadencia y Corrupción 03:41
  10. Torremolinos "La Nuit" 02:13
  11. Julia 00:57
  12. Nostalgia y Olvido 03:24
  13. Ava 01:46
  14. Adios 03:00
Duración total: 27:11
Compositor: Paloma Peñarrubia
Sello: Paloma Peñarrubia
Formato: Descarga Digital
Fecha de lanzamiento 14 de Octubre de 2021
La Vida Chipén